Tarde para olvidar la del pasado sábado en el Pabellón de los Sauces, en el que un grupo de "pandilleros delincuentes", protagonizaron un lamentable espectáculo en el que nuestro equipo se vio duramente dañado y que mancharon de sangre un acontecimiento deportivo.
Durante el transcurso del todo el encuentro, parte de los jugadores del San Martiño y del su propia afición se lo pasaron insultando y amenazando tanto a nuestros jugadores y aficionados como al propio arbitro del partido. Incluso en un momento del encuentro, uno de nuestro jugadores fue agredido por un rival con un cabezazo, por no mencionar mencionar también la dureza con la que se emplearon los jugadores de este equipo durante todo el encuentro.
Pero no contentos con esto, ya que los jugadores del River Tea no quisieron entrar al trapo de las continuas provocaciones, al finalizar el partido, esta "panda de valientes" decidieron pasar la batalla a la grada, en la que siguieron insultando, amenazando, lanzando cigarrillos encendidos, etc, a las parejas y amigos de los jugadores de nuestro equipo. Y como todo esto todavía no les fue suficiente, no tuvieron reparo alguno en agredir a uno de nuestros jugadores, que por lesión se encontraba en la grada, así como a su mujer. Todo esto en presencia, entre otros, de varios niños, tanto de nuestro equipo como de otros equipos que jugaban posteriormente en este mismo pabellón.
Lamentablemente, la "valentía" de todos estos "vándalos" se esfumó en cuanto, alguno de los presentes solicitó telefónicamente, la presencia de la policía. A partir de ese momento la valentía se transformó en una malolienta mancha marrón bajo sus pantalones, que hizo que todos se esfumaran rápidamente.
Finalmente, nuestro compañero agredido tuvo que ser atendido por los efectivos del 061 y trasladado al Hospital del Meixoeiro en el que se le hicieron las curas y pruebas necesarias. Ente otras lesiones presentaba dos grandes brechas provocadas por objetos punzantes, en la frente y una ceja, que le dejaron la cara totalmente ensangrientada, además de varios golpes en la espalda y costillas.
Desde este club, y por el bien de la competición, esperemos que la organización sepa tomar cartas en el asunto y no permita la presencia de este tipo de energúmenos, tanto en los terrenos de juego como en las gradas.
U.D.C. RIVER TEA 2 - SAN MARTIÑO 2
En lo que respeta al partido, el River Tea realizó un buen encuentro en el que llegó al útimo minuto de partido con ventaja en el marcador por 2 goles a 1, pero la transformación de un doble penalti a favor del San Martiño, puso las tablas en el marcador.
Por parte del River Tea jugaron: Fernando, Geli, Lorenzo, Pablo, Jony, Javi Domínguez, Borja y Oscar.
Los goles del River fueron anotados por: Javi Domínguez y Borja.
Por desgracia, tanto el resultado como el partido en sí, carecen de importancia ante los vergonzosos y vandálicos hechos protagonizados por los aficionados y parte de jugadores del San Martiño.
Durante el transcurso del todo el encuentro, parte de los jugadores del San Martiño y del su propia afición se lo pasaron insultando y amenazando tanto a nuestros jugadores y aficionados como al propio arbitro del partido. Incluso en un momento del encuentro, uno de nuestro jugadores fue agredido por un rival con un cabezazo, por no mencionar mencionar también la dureza con la que se emplearon los jugadores de este equipo durante todo el encuentro.
Pero no contentos con esto, ya que los jugadores del River Tea no quisieron entrar al trapo de las continuas provocaciones, al finalizar el partido, esta "panda de valientes" decidieron pasar la batalla a la grada, en la que siguieron insultando, amenazando, lanzando cigarrillos encendidos, etc, a las parejas y amigos de los jugadores de nuestro equipo. Y como todo esto todavía no les fue suficiente, no tuvieron reparo alguno en agredir a uno de nuestros jugadores, que por lesión se encontraba en la grada, así como a su mujer. Todo esto en presencia, entre otros, de varios niños, tanto de nuestro equipo como de otros equipos que jugaban posteriormente en este mismo pabellón.
Lamentablemente, la "valentía" de todos estos "vándalos" se esfumó en cuanto, alguno de los presentes solicitó telefónicamente, la presencia de la policía. A partir de ese momento la valentía se transformó en una malolienta mancha marrón bajo sus pantalones, que hizo que todos se esfumaran rápidamente.
Finalmente, nuestro compañero agredido tuvo que ser atendido por los efectivos del 061 y trasladado al Hospital del Meixoeiro en el que se le hicieron las curas y pruebas necesarias. Ente otras lesiones presentaba dos grandes brechas provocadas por objetos punzantes, en la frente y una ceja, que le dejaron la cara totalmente ensangrientada, además de varios golpes en la espalda y costillas.
Desde este club, y por el bien de la competición, esperemos que la organización sepa tomar cartas en el asunto y no permita la presencia de este tipo de energúmenos, tanto en los terrenos de juego como en las gradas.
U.D.C. RIVER TEA 2 - SAN MARTIÑO 2
En lo que respeta al partido, el River Tea realizó un buen encuentro en el que llegó al útimo minuto de partido con ventaja en el marcador por 2 goles a 1, pero la transformación de un doble penalti a favor del San Martiño, puso las tablas en el marcador.Por parte del River Tea jugaron: Fernando, Geli, Lorenzo, Pablo, Jony, Javi Domínguez, Borja y Oscar.
Los goles del River fueron anotados por: Javi Domínguez y Borja.
Por desgracia, tanto el resultado como el partido en sí, carecen de importancia ante los vergonzosos y vandálicos hechos protagonizados por los aficionados y parte de jugadores del San Martiño.
Como jugador agredido lo primero que quiero, es pedir perdón por empujar tras el cabezazo a mi rival.La violencia no se combate con violencia pero fue la reacción instintiva e inofensiva de dejar claro que puedo comprender,una entrada fuerte a destiempo,o un choque porque el fútbol sala es un deporte de contacto,pero no un cabezazo por la espalada sin en el balón en juego.Llevo casi 20 años jugando al fútbol, fútbol sala y fútbol 7,pero para divertirme,no me gano la vida, y en 20 años la única vez q fui expulsado fue por decir desde el banquillo “Arbi lo esta buscando”.
ResponderEliminarLo que pasa en el campo se queda en el campo,y al final del partido así fue, el jugador que me agredió me pidió disculpas.
En cambio, lo ocurrido en la grada me parece lamentable.Son muchos años jugando y presenciando partidos y competiciones y nunca presencié nada tan absurdo.La organización de la competición,la directiva o el entrenador del San Martiño debería tomar cartas en el asunto,o todos ellos,ya que el comportamiento de los aficionados de este equipo fue irrespetuosa e incívica,con agresiones verbales y físicas,impropio de una SOCIEDAD DEL SIGLO XXI.
Jony